1: Cambia la contraseña predeterminada
Aunque los nuevos routers suelen venir preconfigurados como
WPA2 (o, al menos, WPA), el algoritmo que genera la contraseña por defecto ha
sido burlado en algunas ocasiones. En ciertos modelos, se podía obtener con una
serie de operaciones usando la dirección AC del router y el nombre de la red.
Por ello, no está de más cubrirse las espaldas y cambiar la contraseña
predeterminada por una personalizada.
Accede al router desde el navegador ingresando en la
dirección 192.168.1.1 (o la dirección de puerta de enlace que hayas configurado
a mano). Tendrás que introducir las credenciales de acceso, que suelen ser del
tipo usuario = admin y pass = admin, admin / 1234 o, inclusoadmin /<en
blanco>. Prueba con estos valores o consulta el manual del router para
confirmarlo.
Según el modelo de router que uses, la localización de la
configuración del cifrado inalámbrico puede variar, pero deberías encontrarlo
bajo apartados como Seguridad> WLAN,Conexión Inalámbrica o similares.
Una vez ahí, comprueba que la red usa el cifrado WPA2 (o, al
menos, WPA). Asimismo, cambia el valor del campo Contraseña a uno de tu
conveniencia. Lo ideal es que uses mayúsculas, minúsculas, números y algún
símbolo. Cada vez es más común que el router incluya un medidor de seguridad
que va evaluando la presencia de estos caracteres y la longitud de la clave.
2: Cambia el nombre de la red
El nombre de la red puede dar muchas pistas sobre el tipo de
router que sustenta esa conexión y, en consecuencias, a qué vulnerabilidades
está expuesto. Si lo cambias, se lo pondrás un poco más difícil a los posibles
asaltantes. Normalmente, este parámetro se configura en la misma sección que
usaste en el apartado anterior.Utiliza un nombre que no revele ningún tipo de
información personal, como tu domicilio o nombre. Cuanto más insignificante,
mejor. Yo suelo echar un vistazo a lo que tengo alrededor y pongo lo más
absurdo que se me ocurra. Ahora mismo, mi red doméstica tiene nombre de
pulverizador de agua.
Protege tu red wifi
Si lo deseas, también puedes ocultar la difusión del nombre
de la red (SSID), pero tampoco es demasiado efectivo y complicará más la
configuración de nuevos accesos legítimos a la red.
3: Cambia las credenciales de acceso al router
Como viste en el paso 1, el router usa unas claves de acceso
muy poco seguras. Aunque para acceder al mismo primero han de burlar el cifrado
inalámbrico, no queremos exponer más vulnerabilidades aún. Con acceso al router
podrían cambiar la clave WPA, restringir nuestra dirección MAC y, en
definitiva, echarnos de nuestra propia red inalámbrica.Por ello, localiza
cuanto antes el apartado correspondiente a esta configuración (suele estar
enConfiguración del sistema, Estado del dispositivo o similares) e introduce,
al menos, una nueva contraseña. Si puedes, cambia también el nombre del
usuario.
Cambia el admin y contraseña de tu router
4: Desactiva el acceso por WPS
La tecnología WPS (Wi-Fi Protected Setup) permite conectar
un nuevo dispositivo a la red con solo presionar un botón en el router, sin
introducir la contraseña. Para ello, el dispositivo tiene que estar en la ‘sala
de espera’ de esa conexión. Aunque estadísticamente es improbable que el
atacante esté acechando justo cuando presiones el botón para un invitado en casa,
nada es imposible.
No obstante, esa no es la razón. Hace unos meses se advirtió
que algunos routers tienen un defecto de implementación en el estándar WPS que
es posible explotar para obtener la contraseña de acceso a la red. Por tanto,
como esta característica no suele usarse demasiado, lo más seguro es
desactivarla sin escrúpulos. Ubícala
bajo los parámetros de configuración inalámbrica y desactiva su casilla.
Desactiva WPS
5: Añade restricciones por dirección MAC
Algunos usuarios pueden volverse especialmente cautelosos y
querrán restringir qué dispositivos se conectan a la red mediante su
identificador físico (dirección MAC). Personalmente, creo que añade más
problemas de los que soluciona, pues siempre se puede burlar con técnicas de
spoofing. No obstante, si realmente quieres hacerlo tendrás que anotar las
direcciones MAC de los dispositivos que quieres añadir a la lista blanca o
whitelist. En Windows, puedes obtener la dirección de tu adaptador con el
comando ‘ipconfig /all’.
Restringir por dirección MAC
Para dispositivos móviles, tendrás que hurgar en los menús
de información del sistema. En Android JB, está en Ajustes> Acerca del
teléfono> Estado. Cuando tengas toda la listaañádela a la whitelist del
router.
6: Guarda los cambios
Cuando hayas modificado todos los parámetros mencionados,
tendrás que escribir la nueva configuración en la memoria del router
reiniciándolo. Ubica el apartado Sistema> Reiniciar o similares y envía los
cambios. Si hay una casilla para restaurar los datos de fábrica, NO la
marques.Reiniciar el router
El router se reiniciará y, tras unos segundos, verás cómo tu
red renace con un nuevo nombre y contraseña. Conéctate desde tus dispositivos
usando la nueva configuración y… ¡listo!
Un último apunte. Si puedes realizar los pasos 1, 2 y 3 de
forma regular para prevenir cualquier ataque de tipo asedio continuado, mejor
que mejor. Estos atacantes no escatiman en tiempo y se ponen a capturar
paquetes durante días y semanas hasta tener un volumen crítico para lanzar un
ataque por fuerza bruta. Cambiando el nombre y la contraseña de vez en cuando,
reducirás sus posibilidades virtualmente a cero.
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